Incierta sigue siendo la recuperación de la economía mundial

Pedro Luis Martín Olivares - Incierta sigue siendo la recuperación de la economía mundial
Pedro Luis Martín Olivares - Incierta sigue siendo la recuperación de la economía mundial

Pedro Luis Martín Olivares – La pandemia de Covid-19 empujo a la economía mundial a lo que podría decirse ha sido la depresión más profunda  después de la crisis financiera de 2008, si bien es cierto, que este no es el primer brote de una enfermedad que se propaga por el mundo, es el primero que obliga a los gobiernos a calificarlos como “Guerra”.

Una dura batalla se ha tenido que librar con un enemigo invisible que ha logrado arrodillar a los líderes más prepotentes del planeta. Irónicamente, el 10 de abril, Viernes Santo fue el día más difícil sufrido por la humanidad desde tiempos de Moisés, los esfuerzos de mitigación han llevado a los líderes de todo el planeta a confinar a las personas a sus hogares, los profesionales de la salud han tenido que poner a prueba sus convicciones y decidir entre quien vive y quien muere, la actividades económicas se han detenido súbitamente.

Hemos venido observando como las diferentes estrategias de salud han estado fluyendo, los gobiernos han levantado los bloqueos, la economía real de varios países han comenzado a recuperarse, los analistas apuntan a un crecimiento del PIB global del 7% o más en el tercer trimestre de este año, en comparación con el segundo. No obstante, las estrategias para minimizar los daños y evitar la propagación han generado consecuencias y a pesar que todo se ve y suena mejor, todavía el futuro sigue siendo incierto. Normal? Es probable que el camino para llegar allí siga estando lejos.

Es importante considerar que las interrupciones mundiales de la oferta y la demanda, han generado una caída abrupta del PIB durante el primer semestre del año. La gente sigue nerviosa, esto afecta notablemente la producción. Los vuelos internacionales, solo son posibles para retornar a los turistas varados durante todo este tiempo en países extraños, restaurantes a cielo abierto que daban vida nocturna de las principales capitales turísticas del mundo, hoy se encuentran cerrados. La incertidumbre económica tanto entre los consumidores como entre las empresas está cerca de niveles récord y esto muy probablemente explica la renuencia de las empresas a invertir.

Fuentes afirman que cálculos de Goldman Sachs sugieren que las medidas de distanciamiento social continúan reduciendo el PIB global en un 7-8%, congruente con opiniones de economistas dadas en abril, cuando se habló del término «economía del 90%» para describir lo que sucederá una vez que los bloqueos comiencen a levantarse. Sin embargo, aunque la economía mundial está operando a alrededor de nueve décimas partes de su capacidad, hay mucha variación entre industrias y países. Algunos lo están haciendo relativa y sorprendentemente bien, otros, sin embargo hacen lo que pueden.

Los bienes se han recuperado rápidamente. Las ventas minoristas en los Estados Unidos, superan sus niveles anteriores de la pandemia, al igual que otros países del mundo, según una investigación de JPMorgan Chase. $2 trillones en donaciones en efectivo de los gobiernos desde que golpeó el virus, ha permitido que consumidores de todo el mundo se doten con cosas para que sea soportable su estadía en casa, desde computadoras portátiles hasta pesas, lo cual explica en parte por qué el comercio mundial se ha estancado.

El S&P, uno de los índices bursátiles clave de EE.UU., está por debajo del nivel que comenzó este año, tiene forma de V, aunque el movimiento ascendente es un poco inestable y la incertidumbre continua, el escenario sigue siendo difuso. Aun así, se espera que la brecha de crecimiento entre los países con mejor y peor desempeño en el grupo de países del G7 en 2020 sea de 6,7 puntos porcentuales, mucho más amplia que durante la última recesión mundial hace una década.

De las grandes economías, solo China se expandirá en 2020. Algunos países, como Estados Unidos y Corea del Sur, enfrentan una recesión, pero difícilmente catastrófica. Gran Bretaña, por el contrario, parece estar a la altura de su recesión más profunda desde la Gran Helada de 1709.

Algunos economistas sostienen que la enorme brecha entre países es un espejismo estadístico, que refleja diferentes métodos de calcular las cifras del PIB. En Gran Bretaña, por ejemplo, la forma en que los estadísticos calculan el gasto público significa que el cierre de escuelas y la cancelación de citas hospitalarias tienen un impacto mayor en el PIB que en otros lugares. Pero este efecto es pequeño, la mayor parte de la caída de la producción proviene del sector privado.

En cambio, el rendimiento se reduce a tres factores. La primera es la composición industrial. Países como Grecia e Italia, que dependen del comercio minorista y la hotelería, siempre parecieron más vulnerables que, digamos, Alemania. Su gran sector manufacturero se ha beneficiado de la recuperación mundial de los bienes.

El segundo es la confianza, que parece estar determinada por la experiencia de un país bajo bloqueo. Es probable que el pobre desempeño económico de Gran Bretaña esté relacionado con el mal manejo del gobierno de la pandemia. Los británicos parecen más nerviosos que otros europeos por aventurarse al exterior.

El tercer factor es el estímulo. Es posible que los legisladores estadounidenses no puedan ponerse de acuerdo sobre un complemento, pero ya han promulgado el paquete de rescate más grande del mundo, en relación con el tamaño de su economía. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) cree que será uno de los países ricos con mejor desempeño este año. ¿Qué sigue para la economía del 90%? Algunas autoridades se han visto obligadas a ordenar más cierres. Pero otros pueden calibrar mejor las medidas de distanciamiento social sin poner en peligro la producción. Eso podría acercar al mundo a, digamos, una economía del 95%. De hecho, la OCDE espera que el PIB mundial se recupere aún más este año.

Se puede ser optimista y pensar que una vacuna podría ser la solución. Pero no estamos lejos de una utopía.  La renuencia de las empresas a invertir hoy significará un capital menos productivo en el futuro. Un número creciente de trabajadores en todo el mundo cree que no volverán a sus antiguos trabajos. La reasignación de recursos redundantes hacia empresas más productivas llevará tiempo. Los que fijan las tasas de la Fed estiman que el desempleo no volverá a su tasa anterior a la pandemia del 4% hasta 2023. Los analistas de Goldman Sachs creen que lo hará solo en 2025. Por mucho que la enfermedad en sí tenga efectos duraderos, la recesión planteada por el Covid dejará a la economía mundial en un coma inducido durante algún tiempo.

Sabías que puedes leer este artículo  y otros en Telegram

Telegram Messenger 1 - Black Friday: ofertas para la comunidad de Bitcoin y criptomonedas

Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas

Sé el primero en comentar en «Incierta sigue siendo la recuperación de la economía mundial»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


*