Pedro Luis Martín Olivares – Bitcoin lanzó una ola de declive después de un intento fallido de mantener el crecimiento por encima de $ 8,000. De acuerdo con las observaciones, el BTC se inclinó a mostrar correcciones del 30% después de cada incremento masivo. En nuestro caso, podemos hablar de una disminución de $ 9,000 a $ 6,300. Esta es una disminución muy acusada para los mercados clásicos, pero es poco probable que asuste gravemente a los inversores que se han encontrado en repetidas ocasiones con una volatilidad tan alta.
A primera vista, suena paradójico, pero una disminución de los máximos recientes solo puede fortalecer la confianza en la repetición de patrones históricos y atraer nuevos compradores al mercado. El volumen de operaciones de la primera criptomoneda aumentó un 9,5% a $ 23 mil millones, lo que indica la activación de las ventas por parte de los osos.
Los participantes del mercado a menudo entran en pánico debido a las acciones de las ballenas. La cadena de bloques pública hace posible monitorear la actividad de las billeteras más grandes, por eso los titulares de grandes cantidades de activos digitales pueden usarla para sus propios fines. Sin embargo, nadie sabe realmente qué causó estos u otros movimientos de bitcoins. Las acciones públicas se pueden dirigir para crear la dinámica de precios deseada. La caída del mercado a mínimos locales puede ser útil para las grandes empresas.
El mercado de altcoin está disminuyendo de forma masiva: las 10 monedas principales pierden entre 7% y 10%. La capitalización de mercado total de todas las criptomonedas cayó en un día en un 7,5% a $ 250 mil millones, mientras que el volumen diario de operaciones creció en un 11% a $ 81 mil millones. Sin embargo, si Bitcoin obtiene soporte en el límite superior de $ 7K, esto puede atraer compradores al mercado, quienes estaban esperando la oportunidad de ingresar al mercado con un descuento sobre la base de la corrección después del incremento.
Aunque el ambiente general del mercado es muy positivo, todo lo que está pasando enmascara la verdad bastante desagradable sobre Bitcoin y casi todos los altcoins: todavía están bajo el control completo de los especuladores. La mayoría de los participantes del mercado son «hodlers», o están especulando sobre los precios, mientras que la «visión» de Satoshi era gastar dinero digital en las necesidades diarias.
Los datos de Chainalysis mostraron que, para el período de enero a abril, el 89.7% de toda la actividad en el ecosistema de Bitcoin son transacciones en la dirección de intercambios de criptografía. Durante los primeros 4 meses de 2019, solo el 1.3% de las transacciones se referían al comercio minorista, lo que no es sorprendente: quién pagará el café con Bitcoins, si mañana el precio puede subir en decenas de porcentaje.
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Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas
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