Pedro Luis Martin Olivares -Joe Biden y Donald Trump necesitan cada uno 270 votos electorales para ganar la Casa Blanca. A menos de tres semanas de las elecciones la mayoría de los Estados se inclinan o están firmemente a favor de un candidato, pero en algunos Estados decisivos la carrera es demasiado cerrada.
A fin de dar una opinión lo más objetiva posible sobre las elecciones en Estados Unidos, se utilizarán dos cristales para ver el panorama electoral, en el primero de ellos se utilizará como referencia la data proveniente de la metodología utilizada por el Financial Times, mediante la cual se calculan los promedios de las encuestas para Biden y Trump en cada uno de los Estados, utilizando una fórmula de decaimiento exponencial, que le da más peso a las encuestas recientes.
Luego se usan estos promedios para determinar si un Estado es «duro a favor de un candidato», «inclinado hacia un candidato» o «indeciso». Los Estados donde la diferencia entre los dos candidatos es de más de 10 puntos porcentuales se clasifican como «duros a favor de un candidato», mientras que aquellos con una diferencia de menos de 5 puntos porcentuales se clasifican como Estados «Indecisos». Si un Estado tiene menos de dos encuestas en los últimos 60 días, se usa el Cook Political Report Electoral College para clasificarlo, este es un boletín en línea, no partidista que analiza las elecciones y campañas para la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, el Senado de los Estados Unidos, los Gobernadores y la Presidencia.
La mayoría de los Estados utilizan el método de «el ganador se lo lleva todo» para asignar los votos del colegio electoral: el ganador del voto popular del Estado recibe todos sus votos electorales. Existen algunas variantes, por ejemplo, en Maine y Nebraska el ganador en cada distrito del Congreso recibe un voto electoral y el ganador del Estado recibe dos votos electorales.
Grandes empresas encuestadoras estadounidenses han intentado corregir aquellos métodos que subestimaron el apoyo de Trump en algunos Estados en 2016 y en consecuencia fallaron en sus predicciones, sin embargo, un alto porcentaje de estadounidenses, incluidos los partidarios de Biden, tienden a desconfiar de las encuestas, especialmente a nivel de los Estados. Los promedios de las encuestas son solo una forma de estimar el estado de la carrera y pueden crear posibles valores atípicos en los Estados que no tienen encuestas regulares.
Utilizando la metodología del Financial Times, para el día 14 de Octubre, transformando los datos de las encuestas en votos del Colegio Electoral, el escenario Biden vs Trump es el siguiente:
¿Si las elecciones se celebraran hoy, por quien votaría usted para Presidente de los Estados Unidos?
Joe Biden obtendría 279 votos electorales distribuidos de la siguiente manera:
Votos duros a favor: 194
California 55, New York 29, Illinois 20, New Jersey 14, Washington 12, Massachusetts 11, Maryland 10, Connecticut 7, Oregon 7, New Mexico 5, Hawaii 14, New Hampshire 4, Rhode Island 4, Delaware 3, Vermont 3, Maine 2 y MaineD1 1.
Votos inclinados a favor: 85
Pennsylvania 20, Michigan 16, Virginia 13, Minnesota 10, Wisconsin 10, Colorado 9, Nevada 6 y NebraskaD2 1.
Por su parte Donald Trump obtendría 125 votos electorales distribuidos de la siguiente manera:
Votos duros a favor: 83
Tennessee 11, Alabama 9, Kentucky 8, Louisiana 8, Oakland 7, Arkansas 6, Mississippi 6, Utah 6, West Virginia 5, Idaho 4, North Dakota 3, South Dakota 3, Wyoming 3, Nebraska 2, NebraskaD1 1 y NebraskaD3 1.
Votos inclinados a favor: 42
Indiana 11, Missouri 10, South Carolina 9, Kansas 6, Alaska 3 y Montana 3.
Finalmente, los votos indecisos son: 134
Texas 38, Florida 29, Ohio 18, Georgia 16, North Carolina 15, Arizona 11, Iowa 6 y MaineD2 1.
Es importante resaltar adicionalmente dos puntos, primero, se observa una tendencia general en las encuestas en los últimos meses de reducción de la ventaja de Biden y segundo, el coronavirus ha realineado las preocupaciones y el comportamiento de los votantes.
En Michigan, Pensilvania y Wisconsin, donde Trump ganó por márgenes muy estrechos en 2016, las encuestas muestran que Biden lidera por seis puntos. En Florida la diferencia es muy pequeña. Algunas de las contiendas más reñidas se dan en Estados en los que Trump ganó de manera más convincente en 2016. Carolina del Norte y Georgia han votado por los republicanos en nueve de las últimas 10 elecciones presidenciales, pero en estos momentos la diferencia entre los candidatos es muy poca. Igualmente ocurre en Ohio e Iowa, ambos estados en los que Barack Obama ganó en 2012 pero donde Trump venció a Hillary Clinton en 2016.
Otros estados con problemas incluyen Arizona, un Estado que solo un candidato presidencial demócrata ha ganado en los últimos 70 años, y Texas, donde la ventaja electoral de Trump se ha mantenido por debajo de cinco puntos porcentuales durante gran parte del verano.
Biden tiene una ventaja sustancial entre los votantes latinos, un grupo demográfico en crecimiento en estados indecisos como Arizona y Florida, pero algunas encuestas sugieren que es menos popular entre los votantes latinos que Barack Obama en 2012 o Hillary Clinton en 2016.
Como conclusión de esta primera apreciación, se puede decir que Biden esta ganando las elecciones y que Trump para ser presidente tendría que ganar la totalidad de los Estados duros a su favor, los inclinados a su favor y quitarle a Biden al menos 10 delegados de los Estados inclinados a su favor.
Utilizando un segundo lente para observar el panorama electoral, es conveniente transitar algunas variables clave que pueden incidir de manera conclusiva en los resultados electorales.
1.-La incidencia de la utilización de Big Data, Analytics y Algoritmos en el marco de la inteligencia artificial para identificar electores que pueden cambiar los resultados y transmitirles mensajes subliminales personalizados. Esto permite encubrir resultados reales de lo detectado en las encuestas.
2.-La matriz de opinión creada por la cartelización de los medios de comunicación a favor de Biden reafirma día a día los votos ya captados, el número no crece, ya que tiene casi cuatro años funcionando de manera activa. Se ha creado una percepción de que Biden es el ganador. Contra Trump no hay nada nuevo.
3.-Contra Biden se espera un ataque en los últimos días de la campaña de temas nuevos, como el contenido de los emails de Hilary Clinton, la conspiración contra Trump desde la Casa Blanca durante su anterior campaña presidencial y la conspiración contra Trump durante su actual mandato. Aparte se suman otros temas muy sensibles.
4.-El electorado en general tiene dudas y preocupaciones, se pregunta si Biden se encuentra apto para gobernar y si los errores reiterados que comete en público son prueba de la existencia de un problema mental que puede afectar a los Estados Unidos. Se preocupa por el tema de las fronteras seguras, por la segunda enmienda, por la reducción del presupuesto a las policías y por la ley y el orden.
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Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas
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