Pedro Luis Martín Olivares – La mediocridad profesional derivada por la carestía de fuerza de trabajo calificada ha impactado a varias empresas en Alemania.
Y es que un alto funcionario empresarial reveló que ante ese panorama, la capacitación se ha convertido en uno de los principales desafíos económicos de cara al futuro.
De hecho, el presidente de las Cámaras de Industria y Comercio de Alemania (DIHK), Eric Schweitzer, requirió a la clase política germana a resolver el problema, cuya trascendencia resulta inocultable.
No hay que olvidar que la economía de Alemania es la cuarta economía más poderosa del mundo después de la de Estados Unidos, China y Japón y la quinta por PIB (PPA).
El país es considerado el motor económico de la Unión Europea (UE). En 2014, Alemania registró el mayor superávit comercial en el mundo con 285 mil millones de dólares, por lo que es el mayor exportador de capital a nivel mundial.
Alemania es el tercer mayor exportador del mundo con 1.511.000 millones de dólares exportados en 2014. Las exportaciones representan el 41% de la producción nacional. El sector servicios contribuye alrededor del 70% del total del PIB, la industria 29,1%, y la agricultura 0,9%.
Los principales bienes exportados de Alemania son vehículos, maquinarias, productos químicos, productos electrónicos, productos farmacéuticos, equipos de transporte, metales básicos, productos alimenticios, caucho y plásticos.
La política socio-económica de Alemania se basa en el concepto de economía social de mercado.
Alemania es el primer país industrializado importante del mundo que se compromete a la transición energética renovable llamada Energiewende.
Alemania es el principal productor de turbinas eólicas y tecnología de energía solar en el mundo. Más de 1,5 millones de plantas de generación de energía renovable se han instalado en Alemania durante los últimos 25 años. Las energías renovables producen en la actualidad más del 27% de la electricidad total que se consume en Alemania.
El 99 por ciento de todas las empresas alemanas pertenecen a las denominadas Mittelstand, pequeñas y medianas empresas de propiedad familiar. De las 500 empresas que cotizan en bolsa más grandes del mundo, 50 tienen su sede en Alemania.
Por capitalización de mercado, 20 empresas con sede en Alemania están en el Fortune Global 500 como Volkswagen, Allianz, Daimler, BMW, Siemens, BASF, Munich Re, E.ON, Bayer, y RWE.
Alemania es el mayor productor de lignito en el mundo. Alemania también es rica en madera, hierro, potasa, sal, uranio, níquel, cobre y gas natural.
La energía en Alemania se obtienen principalmente por los combustibles fósiles, seguida de la energía nuclear, y por las energías renovables como la biomasa (madera y biocombustibles), eólica, hidráulica y solar.
En opinión del experto, demasiados individuos carecen de capacitación laboral y nivel educacional para dar respuesta las demandas del desarrollo empresarial en el país y difícilmente la llegada masiva de refugiados alivie la situación.
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Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas
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