Pedro Luis Martín Olivares – A la luz de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), productores de leche de Canadá desean mantenerse excluidos de este bloque económico.
Así, los delegados de la organización Productores Lecheros de Canadá (DFC, por sus siglas en inglés), participan esta semana en la primera ronda de conversaciones entre su país, Estados Unidos y México, reservada a restablecer el mecanismo vigente desde 1994.
En junio pasado se conoció que Bill Hawkins, quien representa a productores de regiones de Toronto, las principales zonas productoras del alimento en Canadá, manifestó vivo interés por formar una alianza con productores mexicanos, pues para su país la leche es un alimento estratégico en el desarrollo nacional.
Por su parte, Álvaro González Muñoz, del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, expresó su satisfacción de que haya coincidencia en cuanto a los productores de ambos países, pues este sector debe dar en los mercados de México y Canadá el cuidado necesario frente a los riesgos de modificar estrategias y políticas de intercambio comercial entre los países involucrados en el TLCAN.
Cabe señalar que la producción de leche nacional se ha visto afectada, de acuerdo con los productores, por el crecimiento de las importaciones, de tal manera que las reglas en el TLCAN tendrán que ser distintas.
Así, datos del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche indican que en 1994 México importaba el equivalente a 1,600 millones de litros de leche en polvo, en la actualidad, las compras al extranjero ascienden a 6,200 millones de litros, con valor de 2,000 millones de dólares anuales.
Canadá no acepta que su política en el comercio de lácteos sea la responsable de pérdidas financieras de productores estadounidenses, la causa es la sobreproducción, afirmó el embajador canadiense en Estados Unidos, David MacNaughton.
Algunos analistas advierten que las medidas de Trump pudieran afectar duramente al sector ya que al abrir más el mercado lechero a los productos estadounidenses podría desestabilizar a la industria, que buscaría una forma de compensación gubernamental.
En el otoño pasado el gobierno de Justin Trudeau anunció que otorgará 350 millones de dólares en compensaciones a los productores de leche canadienses que pudieran verse afectados con el recién firmado Acuerdo de Libre Comercio Canadá-Unión Europea (CETA), que permitirá más importaciones de queso.
La directora de Comunicación y Relaciones Gubernamentales de esa entidad, Isabelle Bouchard, recalcó que su gobierno seguirá apoyando a los productores del sector y la pretensión de proteger el mercado nacional.
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Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas
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