Pedro Luis Martín Olivares – El premio Nobel de economía correspondiente al año 2018, se otorgó a los profesores Paul Romer y William Nordhaus por el trabajo realizado sobre el clima y el crecimiento económico. ¿Por qué crecen las economías y por qué el crecimiento podría superar la capacidad del mundo natural para sostenerlo? Las respuestas a tales preguntas han sido eludidas por mucho tiempo a los economistas. Pero el progreso de la profesión para descifrarlas se debe en gran parte al premio Nobel de ciencias económicas de este año.
A primera vista, los dos eruditos pueden no parecer una pareja natural. Pero el Sveriges Riksbank, que otorga el premio de economía, los elogió por «integrar la innovación y el clima con el crecimiento económico». En otras palabras, ambos hombres han mejorado la forma en que su profesión piensa acerca del funcionamiento de sistemas increíblemente complejos y de importancia crucial. La atención temática de Romer se ha extendido ampliamente a lo largo de su carrera, pero su enfoque nunca se ha alejado mucho de la naturaleza del crecimiento económico. Los científicos solían pensar que el crecimiento sostenido a largo plazo dependía del progreso tecnológico, que a su vez estaba relacionado con la creación de nuevas ideas. Pero lucharon para precisar cómo surgieron las nuevas ideas y cómo la innovación interactuó con otras actividades del mercado.
El señor Romer buscó respuestas al sondear la naturaleza «no rival» de los nuevos conocimientos: el hecho de que las ideas pueden ser explotadas infinitamente. Las empresas o personas que aportan nuevas ideas solo pueden capturar una pequeña parte de los beneficios que se derivan de ellas. En poco tiempo, los competidores copian sus ideas y reducen las ganancias de los innovadores. En los modelos de crecimiento de Romer, el mercado genera nuevas ideas, pero el ritmo al que se generan y la forma en que se traducen en crecimiento dependen de otros factores, como el apoyo estatal para la investigación y el desarrollo o la protección de la propiedad intelectual.
Los «modelos de crecimiento endógeno» producidos por el Sr. Romer y aquellos que fueron influenciados por él, fueron considerados como un paso crítico hacia la comprensión de los patrones de crecimiento económico en todo el mundo. Pero sus deficiencias han sido útiles por lo que dicen sobre sistemas complejos. ¿Qué impide, por ejemplo, que el conocimiento útil y ampliamente disponible se traduzca en una amplia prosperidad? ¿Qué impide la difusión del conocimiento, o su conversión en crecimiento en algunos contextos, pero no en otros? Al resaltar que la creación y difusión de ideas es necesaria para el crecimiento, pero no es suficiente para ello, el profesor Romer identificó una veta rica para que otros investigadores la exploten. Por otra parte, el trabajo del Sr. Nordhaus aborda la interacción de varios sistemas complejos diferentes. La conciencia de los peligros del daño ambiental y de la amenaza del cambio climático, ha crecido durante el último medio siglo. Comprender los costos económicos que imponen dichos daños es esencial para responder a la pregunta de cuánto debería estar dispuesta a pagar la sociedad para evitar la destrucción del medio ambiente. El señor Nordhaus se ha aplicado a este problema de enormes proporciones. Su trabajo más significativo modela los daños económicos de las emisiones de carbono. Para hacerlo, combinó descripciones matemáticas de cómo las emisiones afectan las concentraciones de carbono en la atmósfera con aquellas de cómo el carbono atmosférico afecta la temperatura global y cómo los cambios en la temperatura interactúan con la actividad económica.
Una vez construidos tales «modelos de evaluación integrados», el Sr. Nordhaus podría proyectar cómo las diferentes trayectorias para las emisiones de carbono globales producirían diferentes temperaturas globales. Eso, a su vez, le permitió estimar los costos económicos probables de estos diferentes escenarios, y por lo tanto, qué nivel de reducción de emisiones sería económicamente óptimo. Sus resultados establecen el marco básico para las discusiones sobre política climática. Fue el primero en sugerir que el calentamiento debería limitarse a no más de 2° C por encima de las temperaturas preindustriales del mundo.
Al igual que con el trabajo del señor Romer, las contribuciones del señor Nordhaus también son notables por lo que revelan sus deficiencias. Su trabajo ha provocado un vigoroso debate sobre la mejor manera de reflexionar sobre las enormes incertidumbres asociadas con el calentamiento global, desde cómo las emisiones se traducen en temperaturas más altas hasta cómo la sociedad puede adaptarse a los rápidos cambios en el clima. Los dos ganadores del premio nobel hicieron sus nombres lidiando con problemas que el campo no podía entender y no podía darse el lujo de no entender. Abrieron senderos que los estudiosos continúan, en beneficio tanto de la economía como de la humanidad.
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Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas
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