Pedro Luis Martín Olivares – La República Popular China obtuvo un nuevo triunfo en el impulso de su política de “Una sola China” al establecer relaciones diplomáticas con Panamá, tras el rompimiento oficial de vínculos del país centroamericano con Taiwán.
En la víspera, el presidente panameño Juan Carlos Varela hizo el anuncio durante un mensaje a la nación, y se formalizó en Beijing el acuerdo con la firma de un comunicado conjunto entre el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi; y la vicepresidenta y canciller de la República de Panamá, Isabel de Saint Malo.
Para la toma de esta decisión, el gobierno del istmo evaluó la cada vez más importante presencia de China en América Latina y el Caribe, al punto que es el segundo usuario más importante del Canal de Panamá y uno de los impulsores de la cooperación Sur-Sur.
Hasta la fecha, Panamá mantenía relaciones diplomáticas con Taiwán, mientras que el vínculo con China solo se limitaba a aspectos comerciales, logrando que el gigante asiático transporte el año pasado por el canal 38 millones de toneladas de carga, un 18.9% del total que pasa por esta vía interoceánica.
La cooperación internacional de China ha ido creciendo en los últimos años, especialmente en la región latinoamericana y caribeña. En Panamá, por ejemplo, inició hace unos días la construcción de un puerto de contenedores, con instalaciones de gas natural, en la provincia de Colón, al norte de la nación panameña.
Con esos antecedentes, los cancilleres de ambos países suscribieron el comunicado conjunto en el que anuncian la relación diplomática basada en los principios de respeto mutuo a la soberanía e integridad territorial, no agresión, no intervención de uno en los asuntos internos de otro, igualdad y beneficio recíproco y coexistencia pacífica.
Además, Panamá acepta de manera expresa la existencia de una sola China en el mundo, y reconoce que el gobierno de la República Popular China como al único gobierno legítimo que representa a todo el país y Taiwán, que forma parte de manera inalienable del territorio chino.
En su intervención, el canciller chino Wang Yi sostuvo que Panamá también formará parte del ambicioso proyecto Una Franja, Una Ruta, un plan de comercio e infraestructura propuesto por China para conectar a Asia con Europa, África y América Latina.
Por su parte, la vicepresidenta panameña Isabel de Saint Malo manifestó que la decisión de su país es un paso importante para establecer una alianza estratégica con el gigante del Asia.
El gobierno de Xi Jinping impulsa desde hace varios años la política y el principio de “Una sola China”, como una estrategia para recuperar plenamente a ese territorio.
Pedro Luis Martín Olivares
Economía y Finanzas
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